Por Norberto Valencia González
La NBA sigue evolucionando, y para los apostadores profesionales el análisis de la estadística individual se ha vuelto, en ocasiones, más relevante que el resultado final. Esta combinación de factores ha permitido que incluso jugadores menos conocidos brillen de manera consistente en la considerada mejor competición de baloncesto del mundo.
De ese modo, la NBA continúa sorprendiendo con estadísticas ofensivas impresionantes, ya que actualmente 42 jugadores tienen un promedio de más de 20 puntos por partido. Dieciocho de ellos superan la marca de 25 puntos, y cuatro destacan aún más al alcanzar cifras superiores a los 30 por noche: Joel Embiid, Luka Doncic, Shai y Giannis. Esta explosión ofensiva contrasta significativamente con la temporada 2011/12, donde solo 12 jugadores lograron superar los 20 puntos por encuentro.
En la última década, se ha observado un notorio aumento en el número de jugadores que alcanzan o superan los 20 puntos por partido. Este fenómeno no se puede atribuir a una única causa, sino que es resultado de una combinación de factores que reflejan la evolución del juego y su estilo.
Las franquicias ahora se acostumbran a formar “Big Threes” sin titubear, lo que antes generaba temor. La habilidad y precisión en los tiros han mejorado, permitiendo que cualquier jugador convocado pueda destacar como el mejor del partido. La cuestión de si los jugadores actuales son mejores que sus predecesores es un debate complicado debido a los numerosos cambios en el juego, incluyendo estilos, normativas y competición.
La mejora técnica en el juego de tiro y manejo de balón es evidente en la NBA actual, con jugadores más físicos y entrenamientos más especializados. El nivel defensivo ha disminuido en muchos partidos de temporada regular, con equipos centrados en el aspecto ofensivo. El criterio arbitral también ha sido objeto de debate, ya que los contactos mínimos resultan en faltas, brindando más oportunidades para sumar desde la línea de tiros libres.
El ritmo de juego más rápido y el aumento en la cantidad de posesiones por partido también contribuyen a que más jugadores alcancen el promedio de 20 puntos. La amenaza del tiro exterior es innegable, ya que se lanzan más triples en promedio por partido en comparación con 2011, generando más espacio en la cancha y un juego más perimetral.
