Por Norberto Valencia González
Los Detroit Pistons han marcado un hito en el primer año de Monty Williams como entrenador, pero lamentablemente no de la manera que hubieran deseado. Anoche, enfrentándose a los Brooklyn Nets, sufrieron una derrota por 112-118, confirmando un hecho sin precedentes: 27 derrotas consecutivas en una temporada de la NBA.
Detroit ya carga con la etiqueta de ser el peor equipo en la historia de una temporada de la competición estadounidense, superando el récord compartido previamente por los Cleveland Cavaliers y los Philadelphia 76ers, quienes habían alcanzado las 26 derrotas consecutivas. Los Pistons de la temporada 2023-24 han relegado a un segundo plano a esos equipos.
Para ser precisos, Detroit no ha ganado un partido desde su debut en casa ante los Chicago Bulls el 28 de octubre. Ahora, con un récord general de 2-28, se encuentra a dos derrotas de superar el récord absoluto de derrotas consecutivas en la Liga, en posesión de los Philadelphia 76ers con 28 derrotas entre el final de la temporada 2014-15 y el comienzo del 2015-16. Para alcanzar o evitar este récord, los Pistons primero visitarán a los Boston Celtics y, el próximo domingo 31 de diciembre recibirán a los Toronto Raptors.
Cade Cunningham, la elección número 1 del draft de 2021, ha expresado su frustración ante la situación. A pesar de sus destacadas actuaciones, como los 41 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias de la noche anterior, sus esfuerzos no han sido suficientes para cambiar la suerte de los Pistons. Cunningham insta a sus compañeros a mantenerse unidos en medio de la adversidad.
Monty Williams, señalado en las últimas semanas, reflexiona sobre este difícil momento como entrenador principal de los Pistons en su primera temporada. Reconoce la realidad de la situación y comprende las expectativas no cumplidas, asumiendo la responsabilidad de los resultados del equipo.