Por Norberto Valencia González
En una destacada actuación, el Manchester City aseguró su paso a los cuartos de final de la Liga de Campeones al vencer con claridad al Copenhague por 1-3 en el partido de ida de los octavos de final. El actual campeón del torneo demostró su superioridad desde el principio, dominando el encuentro y generando numerosas oportunidades de gol.
El equipo dirigido por Pep Guardiola no escatimó en su enfoque ofensivo, alineando a Grealish en lugar de Julián Álvarez. A pesar de la resistencia inicial del Copenhague, que presentó a dos de sus nuevos fichajes invernales, el centrocampista Mattson y el defensor McKenna, el City mantuvo el control.
El monólogo del City en la primera media hora incluyó un cabezazo de De Bruyne y oportunidades de Dias y Ake. El primer gol surgió de un excelente pase de Foden y una precisa definición de De Bruyne al palo largo.
Aunque el Copenhague intentó recuperarse, la lesión de Grealish no afectó significativamente al ritmo del partido. Doku aportó dinamismo, y el equipo inglés continuó presionando con oportunidades de Silva, Haaland y Deku. Sin embargo, un error grosero de Ederson permitió a Mattson empatar para el Copenhague.
A pesar de algunos momentos de incertidumbre para el City, Silva aprovechó un rebote afortunado en el descuento para marcar el segundo gol. En la segunda mitad, el Copenhague ajustó su formación a una línea de cinco atrás, mostrando mayor agresividad y control.
Aunque el equipo local logró cierto dominio, el Manchester City seguía siendo el dueño del balón. De Bruyne amenazó con un fuerte disparo, Haaland tuvo un cabezazo desviado y Foden anotó el tercer gol en la última jugada del partido, sentenciando la eliminatoria. Grabara, portero del Copenhague, destacó con importantes intervenciones, pero no pudo evitar la victoria contundente del Manchester City.