En una espectacular final del Mundial de Clubes, el Manchester City, campeón de la UEFA Champions League, se enfrentó al campeón de la Copa Libertadores, el Fluminense. El destino les deparó un encuentro que generó altas expectativas, y ambos equipos llegaron tras un paso cómodo por el torneo.
Desde los primeros segundos del juego, el Manchester City dejó en claro su favoritismo, abriendo el marcador a los 40 segundos gracias a Julián Álvarez. El argentino aprovechó un rebote concedido por el poste derecho de Fábio para introducir el balón con el pecho en la portería rival, resolviendo con facilidad un encuentro en el que el City impuso sus condiciones desde el inicio.
El Fluminense, desafortunadamente, se vio obligado a reajustar su planteamiento tras el gol prematuro. A pesar de intentar adueñarse del esférico para emparejar el marcador, el equipo brasileño se enfrentó a la mala suerte con un segundo gol en propia puerta de Nino, aumentando la ventaja del Manchester City a 2-0 en tan solo 27 minutos.
En la segunda mitad, el Fluminense intentó reponerse, pero el Manchester City continuó dominando. Phil Foden selló la victoria con el tercer gol al minuto 72, tras un centro perfecto de Julián Álvarez. Este último, autor del primer gol, completó su doblete minutos antes del final del partido, llevando el marcador a un contundente 4-0 a favor de los Citizens.
Con este título, Pep Guardiola suma cuatro trofeos del Mundial de Clubes, mientras que el Manchester City se proclama como el mejor club del mundo, al menos hasta el próximo torneo en 2025, que se celebrará en Estados Unidos.